El vértigo de la FIFA.
La última propuesta de la FIFA para mejorar e impulsar el fútbol ha sido la de prohibir los partidos internacionales a más de 2.500 metros de altura, que es casi tanto como vedar los Campeonatos del Mundo a países como Ecuador o Bolivia en lo que parece una medida de presión de Brasil y de Argentina. “We care about football”, reza el lema del máximo organismo que gobierna este deporte. Ya …
Desde siempre, el hombre ha sentido una atracción casi irresistible por las alturas. Elevarse en el aire, mezclarse con las nubes, contemplar el mundo desde el cielo, espiar a un enemigo, salvar obstáculos infranqueables, en definitiva, volar y dominar también las alturas como obsesión contra natura. Pero no sólo lo soñaron, sino que muchos lo intentaron, desde el mítico Ícaro hasta el investigador alemán Otto Lilienthal, y perecieron, uno literariamente, el otro mientras probaba un artefacto en 1896 poco antes de que los hermanos Wright acercaran al ser humano a los cielos por primera vez.
Es posible que nunca dominemos las alturas, pero hemos logrado llevar hasta ellas nuestra baja pasión mas confesable. Parece mentira que quien sólo ha de trabajar por el bien y la expansión del fútbol desconozca los secretos de su éxito: su sencillez, que le permite ser jugado casi en cualquier condición, y las reglas no escritas, como la de que quien organiza el partido, pone el campo y la pelota. Y olvida además la fuerza integradora de este juego, que permite al pobre recibir en su propia casa al rico y discutirle y al humilde diseñar un plan para meter el dedo en el ojo del poderoso.
Dos razones pueden haber motivado esta medida: proteger la salud del deportista requiere de otras actuaciones (nadie ha muerto aún por jugar en La Paz), y evitar buscadas ventajas climáticas o geográficas exige también prohibir jugar bajo las heladas moscovitas o en Sevilla a cuarenta grados, por poner dos ejemplos.
Como siempre, quien se obsesiona con las alturas y desafía la fuerza imparable de la gravedad se lleva un costalazo, el mismo que quien desafía la fuerza imparable del fútbol por obsesionarse con las normas.
Desde siempre, el hombre ha sentido una atracción casi irresistible por las alturas. Elevarse en el aire, mezclarse con las nubes, contemplar el mundo desde el cielo, espiar a un enemigo, salvar obstáculos infranqueables, en definitiva, volar y dominar también las alturas como obsesión contra natura. Pero no sólo lo soñaron, sino que muchos lo intentaron, desde el mítico Ícaro hasta el investigador alemán Otto Lilienthal, y perecieron, uno literariamente, el otro mientras probaba un artefacto en 1896 poco antes de que los hermanos Wright acercaran al ser humano a los cielos por primera vez.
Es posible que nunca dominemos las alturas, pero hemos logrado llevar hasta ellas nuestra baja pasión mas confesable. Parece mentira que quien sólo ha de trabajar por el bien y la expansión del fútbol desconozca los secretos de su éxito: su sencillez, que le permite ser jugado casi en cualquier condición, y las reglas no escritas, como la de que quien organiza el partido, pone el campo y la pelota. Y olvida además la fuerza integradora de este juego, que permite al pobre recibir en su propia casa al rico y discutirle y al humilde diseñar un plan para meter el dedo en el ojo del poderoso.
Dos razones pueden haber motivado esta medida: proteger la salud del deportista requiere de otras actuaciones (nadie ha muerto aún por jugar en La Paz), y evitar buscadas ventajas climáticas o geográficas exige también prohibir jugar bajo las heladas moscovitas o en Sevilla a cuarenta grados, por poner dos ejemplos.
Como siempre, quien se obsesiona con las alturas y desafía la fuerza imparable de la gravedad se lleva un costalazo, el mismo que quien desafía la fuerza imparable del fútbol por obsesionarse con las normas.
Foto: diario.grumpywolf.net
Etiquetas: Actualidad Internacional
posted by piterino @ 10:51 p. m.
12 Comments:
La medida es extraña, y los ejemplos de Sevilla o Rusia me parecen acertadísimos. Jugar en altitud nunca supuso ningún prejuicio a nadie. Raro, raro, raro.
Un abrazo Pedro.
El hombre consigue mejor rendimiento siempre en Altura. Pero claro, para consiguirse hay que aclimatarse. Que signifia eso, un calendario racional para permitirlo. Y eso que querría decir...pues que deberían trabajar. Conclusión, para no trabajar, impongo una prohibición y mantengo miestatus de vividor remuredado.
Putos burócratas...
Una vez más, el rico le pone trabas al pobre. La medida de la FIFA es lamentable y supone una humillación innecesaria para países con muchas dificultades para avanzar tanto económica como deportivamente. Viajamos hacia un fútbol de salón y teledirigido.
Exacto. Estoy con Pablo. A mi me parece que es desautorizar un arma que debería ser legal.
Saludos.
@la quinta del buitre
Es extraña, de ahí las sospechas, porque además uno de los pocos defensores de esta medida en público ha sido ... Pelé.
Un abrazo.
@daniel arias
Mejor no se puede explicar en tan pocas líneas. La pena es que el fútbol esté en buena parte en sus manos.
@pablo
No sé a dónde nos quieren hacer viajar, pero en cualquier caso es un lugar alejado de las bases de este juego. FIFA, lamentable una vez más. Espero que rectifiquen.
@zaragocista
Es un absurdo, es desautorizar que se juegue al fútbol porque sí, porque así lo parecen haber exigido grupos de presión de agunos países interesados.
Absolutamente dantesca la nueva cacicada de la FIFA...
Ya no saben qué hacer para tener contentos a los mandamases de las federaciones grandes...
Luego van de 'universalizadores' del balompié. Menudos embusteros!!!
En fin, nueva aberración de esta lacra del fútbol.
Un abrazo, amigo!
Pelé tiene fama de proclive al poder, así que tampoco es tan raro. Pero ¿se acordará Blatter de la placa con sus palabras en el Hernando Siles de La Paz? (aquello de, "yo nací entre montañas"...)
Últimamente también se ha aficionado a mandar recados a la organización de Sudáfrica 2010. En fin.
Estoy con todos los demás, lo de la FIFA no me parece nada normal, qué habrá detrás de todo esto??? Porqué no dicen la verdad???
El fútbol desgraciadamente está en malas manos, pero no es de ahora, viene ya de atrás. Miedo da pensar lo que será del deporte rey de aqui a unos años...
Un beso.
Hola, Piterino.
Creo que vale la pena que visite los blogs a los que soy asiduo para poner sobre aviso de esto:
http://eefm.blogspot.com/2007/06/plagio-juzguen.html
Saludos.
Hola Piterino.
He caido en este tema desde el dia 1 ya que "compromete" nada menos que el nombre de mi blog "LA PELOTA NO DOBLA".
Tengo que decirte que no es popular la medida y quisiera pensar que es una medida dura para poder rebajarla y sentarse a negociarla. Hace 40 años que Bolivia hace de local en La Paz y a más de 3500 metros, pero la cosa no es tan sencilla como una medida de la ampulosidad del rico contra el pobre.
La FIFA, organismo de corrupción si los hay, se adelantó por escasos días a la intención especulativa de las Federaciones peruana y colombiana de cambiar sus tradicionales localías a ciudades mucho más elevadas que las actuales para sacar ventaja deportiva.
Esperemos que surtan efecto los reclamos y dejen las cosas como estaban, TODAS.
Saludos.
En mi blog hay un apartado sobre el tema que seguirá creciendo tal sucedan las cosas.
@j. urrutia
Precisamente, la impresión que da es que ayudan a todo menos a "universalizarlo". En fin ...
Un saludo!
@david
A Blatter además le acaban de reelegir, así que no se prevé una renovación en el modo de hacer de la FIFA. Porque en la UEFA parece que cambia algo; hasta ahora, Platini me está convenciendo.
@silvi
Como sigan así, esperemos que lo que suceda es que el fútbol se escape de estas garras. Los clubes lo tienen en su mano.
@calígula
Cierto, tampoco quería decir que se limitase a una medida para favorecer a los ricos exclusivamente, debe haber "mar de fondo". Me pasaré por tu blog, saludos!
A mi de la Fifa no me sorprende ya nada. No se que pretenden con esto, es una injusticia que deja muy tocados a estos paises.
Saludos
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