Dialéctica del estilo.
Hemos asistido en los últimos días a una apasionada pero enconada disputa verbal entre dos personajes singulares del mundo del fútbol: Jorge Valdano y Rafa Benítez. L achispa definitiva fueron unos artículos del argentino en los que renegaba del juego del Liverpool con dos argumentos especialmente hirientes: primero, que como Rafa no llegó a ser un jugador de élite, no era capaz de confiar en el talento del futbolista, y segundo, que Anfield aplaudiría hasta a una “mierda pinchada en un palo”.
La respuesta de Benítez consistió en dudar de su capacidad profesional, atribuyendo a Cappa sus méritos como técnico, y en dudar de su capacidad intelectual, atribuyendo su elaborada filosofía a una copia trasplantada de la de Panzeri y Menotti.
Más allá de rivalidades personales, nos encontramos ante un nuevo episodio, con nuevos personajes, de la eterna discusión teórica entre las dos maneras simplificadas de entender este juego, que en su versión más clásica representaban Bilardo y Menotti.
También hoy, Valdano y Benítez parten de dos concepciones casi antagónicas del fútbol: uno sueña con la circulación de la pelota, el otro despierta cuando la consigue robar; un rombo es para uno la seña de identidad del centro del campo y para el otro el dibujo de cuatro hombres cuando un extremo recibe de espaldas. El dogma de fe se transforma en herejía y el discurso en concurso, y es que, como decía Niepalm, “el análisis teológico no se debe separar del zoológico”.
Se distinguen hasta en la manera de atacar al contrincante dialéctico. Valdano, que siente la seguridad de su pluma y el orgullo de su carrera sobre el césped al hablar de filosofía y estilo, entiende el fútbol como arte creativo y como medio de expresión cultural, y por eso reprocha a Benítez el peso de su pizarra y niega el valor real del aplauso de su afición. Rafa, por el contrario, detecta que hablando de planteamiento tiene todas las de ganar y que tal vez Valdano envidie su palmarés en el banquillo. Así que ni se molesta en defenderse y pasa directamente a acabar con el único prestigio que envidia del oponente: su bello discurso. El contraataque no tiene secretos para él.
Así que la contienda comenzó con dominio del equipo rojo; su defensa adelantada dominaba el campo y su mediapunta conectó dos veces con los puntas tras largas posesiones de pelota. El equipo negro reaccionó, su potente línea de medios empezó a robar balones ya cortaron distancias tras un rechace para terminar empatando en una jugada ensayada a balón parado. El partido está 2-2 y la pelota en el tejado, justo donde a ninguno de los dos le complace. La única pena de todo esto es comprobar que incluso en el fútbol de las ideas existe la falta táctica y se tiende a no respetar al rival.
La respuesta de Benítez consistió en dudar de su capacidad profesional, atribuyendo a Cappa sus méritos como técnico, y en dudar de su capacidad intelectual, atribuyendo su elaborada filosofía a una copia trasplantada de la de Panzeri y Menotti.
Más allá de rivalidades personales, nos encontramos ante un nuevo episodio, con nuevos personajes, de la eterna discusión teórica entre las dos maneras simplificadas de entender este juego, que en su versión más clásica representaban Bilardo y Menotti.
También hoy, Valdano y Benítez parten de dos concepciones casi antagónicas del fútbol: uno sueña con la circulación de la pelota, el otro despierta cuando la consigue robar; un rombo es para uno la seña de identidad del centro del campo y para el otro el dibujo de cuatro hombres cuando un extremo recibe de espaldas. El dogma de fe se transforma en herejía y el discurso en concurso, y es que, como decía Niepalm, “el análisis teológico no se debe separar del zoológico”.
Se distinguen hasta en la manera de atacar al contrincante dialéctico. Valdano, que siente la seguridad de su pluma y el orgullo de su carrera sobre el césped al hablar de filosofía y estilo, entiende el fútbol como arte creativo y como medio de expresión cultural, y por eso reprocha a Benítez el peso de su pizarra y niega el valor real del aplauso de su afición. Rafa, por el contrario, detecta que hablando de planteamiento tiene todas las de ganar y que tal vez Valdano envidie su palmarés en el banquillo. Así que ni se molesta en defenderse y pasa directamente a acabar con el único prestigio que envidia del oponente: su bello discurso. El contraataque no tiene secretos para él.
Así que la contienda comenzó con dominio del equipo rojo; su defensa adelantada dominaba el campo y su mediapunta conectó dos veces con los puntas tras largas posesiones de pelota. El equipo negro reaccionó, su potente línea de medios empezó a robar balones ya cortaron distancias tras un rechace para terminar empatando en una jugada ensayada a balón parado. El partido está 2-2 y la pelota en el tejado, justo donde a ninguno de los dos le complace. La única pena de todo esto es comprobar que incluso en el fútbol de las ideas existe la falta táctica y se tiende a no respetar al rival.
Fotos: EFE
Etiquetas: Actualidad España.
posted by piterino @ 9:34 p. m.
18 Comments:
Esto lo he vivido muy de cerca, y me pongo del lado de Benitez. La expresión que utilizó Valdano hizo mucho daño a Rafa, nunca he visto a Benitez tan alterado, pero Valdano metio la pata hasta el fondo, no entiendo como puede calificar al equipo de esta manera.
Valdano quizá envidie los titulos, pero nose que puede envidiar Rafa. ¿El discurso? Rafa igual tiene menos dialéctica, pero de fútbol ha ddemostrado que le da mil vueltas a Valdano.
Saludos (se nota que no soy muy objetivo, lo siento).
Buenas,
Respecto a la polémica, me parece normal que Rafa se enfade, las declaraciones de Valdano me parecen fuera de lugar y de mal gusto, cosa que por otra parte me extraña porque siempre me pareció un tipo educadísimo.
Por otra parte, si hablamos de la manera de entender el deporte rey de cada uno, sin pestañear me quedo con Jorge Valdano, amante del Jogo bonito y del espectáculo.
Un beso Pedro.
@ todos
Jorge Valdano pide disculpas a Rafa Benítez en 'La última de Marca' del día de hoy. Echarle un vistazo si podéis.
@ piterino
Pedro, no estoy de acuerdo con Jorge Valdano. No entraré en el simplismo de comparar los curriculum de ambos porque el madrileño saldría ganador y no por poco. Pero hay entrenadores como Lippi y Capello que son prestigiosos y sí jugaron en el primer nivel en su juventud. Para mí ver como el Liverpool vasculaba en la elimintaria frente al Barsa es también, y nunca mejor dicho, Jogo Bonito. Me parace muy demagogo que sólo el tikitaka tenga que ser considerado como un dogma absoluto de lo que es el espectáculo en sí.
PD:Ah, más quisieran los equipos tener hichadas como la de Anfield.
Un abrazo.
No sabía exactamente lo ocurrido, pero sí he leído el artículo "Perdón" que escribe Valdano en la última de Marca y creo que no fue intencionado.
Quizás se equivocó en las formas, pero en realidad tiene razón que no fue nada ventajista ni criticó la trayectoria global de Benítez.
Para mi son dos genios la verdad.
Saludos.
Muy bueno, Pedro. Como suelo estar habitualmente desinformado, no me había enterado. De todas formas, estas 'faltas tácticas', a veces son la salsa del fútbol. Siempre y cuando impere la cordura y el respeto, como parece ser el caso.
Un saludo
No tenía ni idea de lo sucedido.
Yo por el fútbol que hacen me posiciono del lado de Valdano pero no estoy de acuerdo con lo que ha dicho sobre Rafa.
Por otra parte, ojalá tuviéramos nosotros "esa mierda de afición"... como califica Valdano la de Anfield, es justo lo que hace falta en Can Barça, entre otras cosas.
Un saludo Pedro.
@todos
Acaba de ascender el Almería, pero la derrota del Athletic me impedía disfrutar la celebración y la he tenido que interrumpir.
Respecto al post, os contesto a todos en conjunto esta vez.
Voy a dar mi opinión sobre la polémica, porque en el artículome limito a contar lo que ha pasado, sin más. Creo que hay que distinguir aquí dos cuestiones: el fondo del asunto, en el que prefiero fijarme en que chocan dos maneras diferentes de entender este juego (y no una rencilla personal que deriva de su coincidencia en el Real Madrid), y las formas de Valdano, que por esta vez le han hecho perder la gracia y la finura que acompañan a su estilosa pluma.
Así que pienso que nada malo hay en que a Valdano no le enamore el estilo del Liverpool y lo diga, con el beneficio que le concede hacerlo justo cuando le adorna el triunfo, siempre y cuando evite determinados comentarios.
De cualquier manera, a Benítez le noto muy dolido desde hace tiempo con un determinado sector de la Prensa española (y, en especial, con algunos comentaristas) por criticar pos sistema su planteamiento y no valorar sus logros.
@nicolás ribas
Sólo una pequeña putualización, que tal vez me he expresado yo mal: Valdano no escribió que la afición de Anfield "fuera una mierda", sino que es tal su grado de calor y cercanía con el Liverpool, que apluadirían incluso a "una mierda pinchada en un palo puesta en el centro del campo".
Un saludo!
El futbol Benitez me da asco.
Piterino, grande como siempre. ¿Cómo logras escribir así post tras post? ¡Qué alguien te ponga una cadena!!! porque nos dejas muy rezagados al resto.
No estuve al tanto de esta polémica, pero sé que a Valdano a veces le da por filosofar y se equivoca en los mensajes.
Hola
Creo que Jorge pierde crédito al decir que Benítez no fue un buen futbolista y por eso no quiere buen fútbol.
Clemente tenía más talento que nadie, y mirar como entiende el fútbol. O incluso Bilardo no era ningún manco, por lo que dice mi padre.
Así que yo, ANTI BENITEZ, total, voy con Rafa en esta disputa.
Benítez es un gran entrenador. Probablemente, junto a Capello y Mourinho, está entre los tres mejores. Valdano simplemente pagó caro su ego en un artículo, se disculpó y pidió perdón. Valdano se equivocó pero eso le honra. Un abrazo!
No me había enterado de esto. Pero tiene razón Valdano.
Evidente yo concuerdo con las opiniones de don Rafael Benítez, el mejor entrenador del mundo.
A Valdano ya los ufrimos en Valencia... mucha teoría pero a la hora de la verdad no tiene ni idea... podríamos decir que es un "encantador de serpientes". Además, bastante demagogo.
@anónimo
Para gustos, los colores.
@csai d.
Gracias, de verdad! Esta vez no filosofó, entiendo su mensaje pero no el sobre en el que lo envió.
Un saludo!
@daniel arias
Bueno, tampoco dijo exactamente eso; dijo que creía que, al no haber sido ni Mourinho ni él futbolostas de élite, les costaba confiar en el talento de los jugadores. Benítez defiende su trabajo amparado por sus logros y hace bien.
Un saludo!
@rubén uría
Cierto, como decían Andrés, Valdano pidió disculpas por las formas, que no por el fondo, en u página del sábado en Marca. Sin duda, le honra y rectificar siempre es cosa de sabios.
@david
No creo que sea una cuestión de tener razón o no; uno puede alinearse con una manera de ver y entender el fútbol, pero está claro que Valdano se ha equivocado, al menos en las formas, justo donde él no se suele confundir. Y lo sabe, de ahí sus disculpas.
@hoeman
Jeje, no esperaba menos; sabía que te alinearías con el gran Rafa.
Se siente injustamente tratado por buena parte de la prensa española pero le avalan sus números y su brillante palmarés.
Respeto sobretodo la palabra de Valdano. Podemos decir que se ha equivocado o no, pero no que habla sin fundamentos. Cuando refiere a que Benitez no termina de confiar en las capacidades del jugador esta tocando uno de los temas fundamentales de la direccion tecnica. Por ajustar un sistema (como haria un tipo como Bilardo) muchas veces se pierde potencial del jugador y hasta puede destruirselo. Busquemos un equilibrio Benitez por favor!!!
Saludos de Buenos Aires!!!
LA-PELOTA-NO-DOBLA.BLOGSPOT.COM
Vaya un intercambio de links.
Confirmame.
Saludos.
Es lamentable la actitud de Jorge Alberto "copia citas" Valdano.
Benítez es un caballero y un gran técnico. Ahí está el palmarés.
Las palabras se las lleva el viento, y los títulos quedan en las vitrinas de los clubes y en la retina de los aficionados...
@calígula
Mañana te agrego a mis links, gracias, un saludo!
@j. urrutia
Esta vez se ha equivocado, pero me confieso un admirador del discurso y la prosa de Valdano. Creo que es autor de numerosas expresiones geniales que han calado hondo en nuestro fútbol y que representan a la perfección muchas sensaciones, a la par que defiende una manera de entender el fútbol muy respetable.
Pero estoy de acuerdo con tu última reflexión.
Un saludo!
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