lunes, abril 03, 2006

Los Elefantes velan armas.

Cuenta una leyenda en Costa de Marfil que hubo una manada de elefantes en la sabana que se instalaron en un área de terreno que defendían con una organización y una fiereza propia de los militares; aquellos elefantes demostraban poseer una inteligencia para la defensa y el combate cercana a la humana. Valga esta leyenda africana como símbolo del espíritu y los rasgos de la selección costamarfileña entrenada por Henri Michel, que estarán presentes en el próximo Mundial de Alemania.
Si además hablamos de un país cuyo lema nacional reza: "Unidad, Disciplina y Trabajo" ("Unitè, Discipline et Travail"), el símbolo queda mejor perfilado.


Costa de Marfil se ha clasificado para la fase final de un Campeonato del Mundo por primera vez en su historia, y es la actual subcampeona de África. Estamos, pues, ante el mejor momento de siempre en el fútbol costamarfileño. Henri Michel es el gran responsable técnico como seleccionador de los Elefantes. Ha dotado al equipo de una mayor disciplina táctica y una progresiva organización, que se ha combinado con el enorme potecial físico y futbolístico de esta generación de "elefantes" que, sin duda, ha pasado ya a la historia del país.
La clasificación para el Mundial se consiguió tras luchar durante toda la fase con la favorita Camerún y de la forma más dramática posible, con el ya famoso penalti de Wome ante Egipto en el descuento. El sorteo mundialista de Leipzig no ha sido, desde luego, benévolo con los de Michel, que tendrán que medirse a Argentina, Holanda y Serbia y Montenegro para obtener el pase a octavos de final.



En cuanto al plantel que seleccionará Michel para la gran cita alemana, no hay excesivas dudas. Tiziè parece haberle arrebatado el puesto a Gnanhouan en la portería. Irregular y con escasa agilidad; en defensa, Eboué debe ser titular en el lateral derecho, sobre todo por su espectacular final de campaña en el Arsenal. Es más técnico que Zoro, que será su suplente. Otro "gunner", Kolo Touré, formará en el centro de la zaga junto al potente Kouassi, posiblemente (con el veterano Domoraud en el banco). Para el lateral izquierdo, el velocísimo Boka aportará sus constantes subidas; sus dos pivotes son de lo más destacado del equipo. Yaya Touré aporta su descomunal potencia y su zancada, y Zokora es fuerte y pausado en el toque. Ambos tratan bien el balón aunque son bastante lentos. Para las bandas, Akale es el favorito para la izquierda tras su gran Copa de África, con su verticalidad y rapidez. En la derecha puede entrar Fae, que es un medio centro recuperador que se coloca a veces en banda y entrará ahí si Michel plantea el partido de manera más conservadora; si la apuesta es más arriesgada, Yapi Yapo o Bonaventure Kalou aportan mucha más velocidad y penetraciones por el costado, también en diagonal; y arriba hay muchas opciones, aunque la dupla Drogba- Arouna Koné parece partir como titular. El delantero del Chelsea es la gran estrella del equipo, y ha sido decisivo tanto en la fase de clasificación para el Mundial como en la Copa de África; Koné, por su parte, está creciendo en el PSV y posee mucho talento aunque es algo individualista. La movilidad de Bakari Koné, las llegada arrancando desde una banda de Romaric o adelantar a Kalou son otras opciones para el ataque, cho además de Aruna Dindane, cuyos problemas en el Lens le han hecho perder el sitio en el once de Henri Michel. Y, a todo esto, Salomon Kalou no va a jugar el Mundial, al menos con Costa de Marfil, y ya tramita su nacionalización holandesa. Una pena para los Elefantes y una posible curiosidad, pues se podrían enfrentar dos hermanos defendiendo dos camisetas diferentes.


Los Elefantes velan armas y afilan sus colmillos. No temen a nadie y tienen poco que perder. "Sigue al caimán y beberás agua limpia", dice un proverbio Baulè . ¿Alguien les subestima?